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Comprar Vino de Kollektiv Peternell

La bodega Kollektiv Peternell es una de las nuevas incorporaciones en el panorama vinícola de Austria. Esta bodega emergente fue fundada por tres jóvenes apasionados por el vino. Uno de ellos, Paul Schuster, originario de Hainburg, comenzó su viaje en el mundo del vino como un autodidacta. Su curiosidad lo llevó a viajar en su VW bus naranja, y durante una de sus paradas en Cataluña, conoció a Massimo Marchiori, el propietario de Partida Creus. Fue Marchiori quien planteó la idea de que Paul debería hacer su propio vino, ya que tenían todo lo necesario: uvas, tanques y una bodega.

A este proyecto se unió Dave Ferris, un joven inglés que Paul había conocido recientemente. Juntos, decidieron embarcarse en la aventura de producir su propio vino en Partida Creus. A pesar de que sus caminos se separaron temporalmente, con Dave yendo a Barcelona y Paul regresando a Viena, ambos mantuvieron la comunicación y discutieron sobre dónde establecer su proyecto. Finalmente, decidieron que Austria era el lugar ideal. Encontraron una bodega en Petronell y se asociaron con H.P. Harrer para comprar uvas. Durante este tiempo, se unió al equipo Simon Ecker, un amigo de la infancia, aportando manos adicionales al proyecto.

Viñedos

Los viñedos de Kollektiv Peternell se encuentran en la región de Neusiedl. Aunque en papel se menciona Carnuntum, las uvas provienen todas de Neusiedl.

Filosofía

Kollektiv Peternell se centra en la producción natural y auténtica de vinos. Utilizan un proceso llamado "whole bunch", donde las uvas se vinifican enteras. Este método, que ellos llaman "Methode Tom Lubbe", es similar al utilizado por otros viticultores reconocidos como Claus Preisinger y Judith Beck. Los vinos se fermentan en tanques de acero o madera y se dejan madurar durante un año. No se añaden sustancias, no se clarifica y no se utiliza azufre en su elaboración. Finalmente, los vinos se embotellan sin filtrar. Esta técnica da como resultado vinos brillantes con gran luminosidad y dinamismo. Su lema es “No bullshit wines”, reflejando su enfoque directo y sin pretensiones en la vinificación.

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Comprar Vino de Kollektiv Peternell

La bodega Kollektiv Peternell es una de las nuevas incorporaciones en el panorama vinícola de Austria. Esta bodega emergente fue fundada por tres jóvenes apasionados por el vino. Uno de ellos, Paul Schuster, originario de Hainburg, comenzó su viaje en el mundo del vino como un autodidacta. Su curiosidad lo llevó a viajar en su VW bus naranja, y durante una de sus paradas en Cataluña, conoció a Massimo Marchiori, el propietario de Partida Creus. Fue Marchiori quien planteó la idea de que Paul debería hacer su propio vino, ya que tenían todo lo necesario: uvas, tanques y una bodega.

A este proyecto se unió Dave Ferris, un joven inglés que Paul había conocido recientemente. Juntos, decidieron embarcarse en la aventura de producir su propio vino en Partida Creus. A pesar de que sus caminos se separaron temporalmente, con Dave yendo a Barcelona y Paul regresando a Viena, ambos mantuvieron la comunicación y discutieron sobre dónde establecer su proyecto. Finalmente, decidieron que Austria era el lugar ideal. Encontraron una bodega en Petronell y se asociaron con H.P. Harrer para comprar uvas. Durante este tiempo, se unió al equipo Simon Ecker, un amigo de la infancia, aportando manos adicionales al proyecto.

Viñedos

Los viñedos de Kollektiv Peternell se encuentran en la región de Neusiedl. Aunque en papel se menciona Carnuntum, las uvas provienen todas de Neusiedl.

Filosofía

Kollektiv Peternell se centra en la producción natural y auténtica de vinos. Utilizan un proceso llamado "whole bunch", donde las uvas se vinifican enteras. Este método, que ellos llaman "Methode Tom Lubbe", es similar al utilizado por otros viticultores reconocidos como Claus Preisinger y Judith Beck. Los vinos se fermentan en tanques de acero o madera y se dejan madurar durante un año. No se añaden sustancias, no se clarifica y no se utiliza azufre en su elaboración. Finalmente, los vinos se embotellan sin filtrar. Esta técnica da como resultado vinos brillantes con gran luminosidad y dinamismo. Su lema es “No bullshit wines”, reflejando su enfoque directo y sin pretensiones en la vinificación.