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Comprar Vino de Bodegas Albamar
Bodegas Albamar se encuentra en Cambados, un pintoresco municipio en el corazón del Valle del Salnés, en Galicia. Este lugar, reconocido por ser una de las zonas más destacadas para el cultivo de la uva Albariño, ha sido testigo del crecimiento y evolución de esta pequeña bodega familiar.
Fundada en 2006 por Xurxo Alba, la bodega tiene sus raíces en una tradición familiar que data de generaciones anteriores, cuando su padre, Luis Alba, comenzó a plantar viñedos de albariño para elaborar vino a granel que vendía en el furancho (taberna familiar) sin etiquetar.El impulso que Xurxo Alba le dio al negocio tras su regreso de sus estudios en enología ha sido clave para el éxito de Albamar. Desde entonces, no ha dejado de experimentar y perfeccionar su técnica. Xurxo ha trabajado en otras bodegas de la región, lo que le ha permitido absorber conocimientos y aplicarlos con una visión renovada. Albamar se ha convertido en sinónimo de vinos frescos, salinos y auténticos, siempre con el sello de calidad que lo caracteriza.
Viñedos
Los viñedos de Bodegas Albamar se extienden por 10 hectáreas, incluyendo viñas propias y arrendadas, situadas a muy poca distancia del mar, lo que confiere a sus vinos un marcado carácter atlántico. El suelo predominante es de granito y arena, pero en ciertas parcelas se encuentran suelos arcillosos que Xurxo ha aprendido a manejar a lo largo de los años, a pesar de las dificultades que representa trabajar en una zona tan lluviosa como la costa gallega.
La proximidad al Océano Atlántico tiene un impacto crucial en el microclima de la región. Las viñas reciben una influencia directa del mar, que mitiga los efectos de las altas temperaturas y proporciona un entorno perfecto para la maduración lenta de la uva, preservando la acidez y la frescura características del albariño. Esto resulta en vinos con una acidez viva y un perfil mineral que recuerda a la brisa marina.
En cuanto al clima, la región del Salnés es conocida por sus altas precipitaciones (hasta 1.500 mm anuales), lo que exige una viticultura adaptada a estas condiciones. A pesar de las dificultades que presenta la elevada humedad, los vinos de Albamar han logrado destacar por su frescura y su capacidad para reflejar su terroir.
Filosofía
La filosofía de Bodegas Albamar se basa en la búsqueda de la pureza y la autenticidad en cada botella, lo que implica un enfoque de viticultura lo más respetuoso posible con el entorno. Xurxo Alba es un ferviente defensor de las fermentaciones espontáneas con levaduras autóctonas, lo que permite que los vinos expresen de manera genuina el carácter del terruño.
El proceso de vinificación varía según el vino y la añada, pero en términos generales, Xurxo evita la intervención innecesaria. El uso moderado de sulfuroso es una de las prácticas más importantes, especialmente en una región como Galicia, donde las enfermedades de la vid, como el mildiu, son comunes. No obstante, siempre busca limitar su uso al mínimo necesario para garantizar la salud de las uvas sin comprometer la calidad del vino.
Entre los métodos más destacados, Xurxo utiliza el batonnage (remover las lías) en vinos seleccionados para aportar volumen y textura sin perder la frescura. Además, ha implementado una política de no realizar fermentación maloláctica en algunos de sus albariños, lo que resalta la acidez natural de la uva y les confiere a sus vinos un carácter vibrante y refrescante.
Xurxo también está comprometido con la elaboración de vinos con mínima intervención, es decir, respetando al máximo el ciclo natural de la uva y evitando cualquier manipulación que pueda alterar su esencia. Los vinos de Albamar son una clara representación de su entorno, y Xurxo busca capturar esa sensación en cada sorbo. "El vino debe transmitir el paisaje de donde proviene", menciona Xurxo, y bajo esta premisa trabaja en cada añada.
El leitmotiv de Bodegas Albamar es la constante búsqueda de la excelencia a través de la sencillez y el respeto por la naturaleza. Xurxo Alba no busca grandes producciones, sino ofrecer vinos que hablen de su origen. Para él, la conexión entre el viñedo y el vino es esencial, y por eso cuida cada detalle en el proceso, desde la vendimia manual hasta el embotellado, asegurándose de que cada botella sea una expresión fiel de su filosofía.
Los vinos de Albamar, especialmente su emblemático Albariño, son vinos frescos, de acidez marcada y con un carácter salino que los hace únicos en la región. Esta frescura, junto con la mineralidad aportada por los suelos graníticos, es lo que diferencia a los vinos de Albamar de otras bodegas de la denominación Rías Baixas. Albamar busca la autenticidad y la biodiversidad en cada copa, sin recurrir a técnicas invasivas que alteren la naturaleza de la uva.
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Comprar Vino de Bodegas Albamar
Bodegas Albamar se encuentra en Cambados, un pintoresco municipio en el corazón del Valle del Salnés, en Galicia. Este lugar, reconocido por ser una de las zonas más destacadas para el cultivo de la uva Albariño, ha sido testigo del crecimiento y evolución de esta pequeña bodega familiar.
Fundada en 2006 por Xurxo Alba, la bodega tiene sus raíces en una tradición familiar que data de generaciones anteriores, cuando su padre, Luis Alba, comenzó a plantar viñedos de albariño para elaborar vino a granel que vendía en el furancho (taberna familiar) sin etiquetar.El impulso que Xurxo Alba le dio al negocio tras su regreso de sus estudios en enología ha sido clave para el éxito de Albamar. Desde entonces, no ha dejado de experimentar y perfeccionar su técnica. Xurxo ha trabajado en otras bodegas de la región, lo que le ha permitido absorber conocimientos y aplicarlos con una visión renovada. Albamar se ha convertido en sinónimo de vinos frescos, salinos y auténticos, siempre con el sello de calidad que lo caracteriza.
Viñedos
Los viñedos de Bodegas Albamar se extienden por 10 hectáreas, incluyendo viñas propias y arrendadas, situadas a muy poca distancia del mar, lo que confiere a sus vinos un marcado carácter atlántico. El suelo predominante es de granito y arena, pero en ciertas parcelas se encuentran suelos arcillosos que Xurxo ha aprendido a manejar a lo largo de los años, a pesar de las dificultades que representa trabajar en una zona tan lluviosa como la costa gallega.
La proximidad al Océano Atlántico tiene un impacto crucial en el microclima de la región. Las viñas reciben una influencia directa del mar, que mitiga los efectos de las altas temperaturas y proporciona un entorno perfecto para la maduración lenta de la uva, preservando la acidez y la frescura características del albariño. Esto resulta en vinos con una acidez viva y un perfil mineral que recuerda a la brisa marina.
En cuanto al clima, la región del Salnés es conocida por sus altas precipitaciones (hasta 1.500 mm anuales), lo que exige una viticultura adaptada a estas condiciones. A pesar de las dificultades que presenta la elevada humedad, los vinos de Albamar han logrado destacar por su frescura y su capacidad para reflejar su terroir.
Filosofía
La filosofía de Bodegas Albamar se basa en la búsqueda de la pureza y la autenticidad en cada botella, lo que implica un enfoque de viticultura lo más respetuoso posible con el entorno. Xurxo Alba es un ferviente defensor de las fermentaciones espontáneas con levaduras autóctonas, lo que permite que los vinos expresen de manera genuina el carácter del terruño.
El proceso de vinificación varía según el vino y la añada, pero en términos generales, Xurxo evita la intervención innecesaria. El uso moderado de sulfuroso es una de las prácticas más importantes, especialmente en una región como Galicia, donde las enfermedades de la vid, como el mildiu, son comunes. No obstante, siempre busca limitar su uso al mínimo necesario para garantizar la salud de las uvas sin comprometer la calidad del vino.
Entre los métodos más destacados, Xurxo utiliza el batonnage (remover las lías) en vinos seleccionados para aportar volumen y textura sin perder la frescura. Además, ha implementado una política de no realizar fermentación maloláctica en algunos de sus albariños, lo que resalta la acidez natural de la uva y les confiere a sus vinos un carácter vibrante y refrescante.
Xurxo también está comprometido con la elaboración de vinos con mínima intervención, es decir, respetando al máximo el ciclo natural de la uva y evitando cualquier manipulación que pueda alterar su esencia. Los vinos de Albamar son una clara representación de su entorno, y Xurxo busca capturar esa sensación en cada sorbo. "El vino debe transmitir el paisaje de donde proviene", menciona Xurxo, y bajo esta premisa trabaja en cada añada.
El leitmotiv de Bodegas Albamar es la constante búsqueda de la excelencia a través de la sencillez y el respeto por la naturaleza. Xurxo Alba no busca grandes producciones, sino ofrecer vinos que hablen de su origen. Para él, la conexión entre el viñedo y el vino es esencial, y por eso cuida cada detalle en el proceso, desde la vendimia manual hasta el embotellado, asegurándose de que cada botella sea una expresión fiel de su filosofía.
Los vinos de Albamar, especialmente su emblemático Albariño, son vinos frescos, de acidez marcada y con un carácter salino que los hace únicos en la región. Esta frescura, junto con la mineralidad aportada por los suelos graníticos, es lo que diferencia a los vinos de Albamar de otras bodegas de la denominación Rías Baixas. Albamar busca la autenticidad y la biodiversidad en cada copa, sin recurrir a técnicas invasivas que alteren la naturaleza de la uva.