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Comprar Vino de Pura Vida
Pura Vida se llama la bodega de Rober y María, una pareja enamorada de su viñedo y sus vinos naturales. Comenzaron su aventura allá por el año 2012 en Fondón, Almería (España), y desde el principio el objetivo estuvo marcado en trabajar la tierra de la forma más respetuosa y ecológica posible.
Viñedo de Pura Vida
Pura es la vida que habita en sus campos. Pura es la uva que crece en sus viñas. La pareja vitivinícola cuida al máximo el terruño e interviene poco y nada en los procesos naturales del vino. Al estar situados en un típico pueblo de la Alta Alpujarra Almeriense, protegido por Sierra Nevada, Sierra de Gádor y el río Andarax, sus suelos arcillosos son únicos. Un ecosistema, entre la tierra y el clima, que lo vuelve ideal en la historia tradicional del vino.
En este lugar geográfico, hay pocas precipitaciones, muchos días de sol y grandes cambios de temperatura entre el día y la noche. Poseen media hectárea para vinificación y una hectárea de uva blanca de la zona. En Pura Vida no se usa nada de productos químicos, no riegan. El abono que utilizan son los desechos de la vendimia y el ganado que utilizan para desbrozar. Tampoco hacen labor de labrado, para mantener el equilibrio natural, sostenible y estructura del suelo.
Vinos de Pura Vida
Aquí se manifiesta el poder de la sonrisa y el amor por la vida. Recolectan la uva cuando está en su momento adecuado de azúcar y acidez, la seleccionan a mano y pasan a la bodega. Allí, se despalilla y esperan la hora ideal, el momento mágico de su fermentación natural espontánea. Sus vinos no están clarificados, ni filtrados. Se dejan llevar por la confianza absoluta en el tiempo y las bajas temperaturas, quienes terminarán de limpiar y decantar el vino. De eso se trata hacer vinos naturales desde un marco ecologista. Todo el trabajo de la bodega Pura Vida es completamente natural, desde la recogida de la uva hasta el etiquetado y embotellado.
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Comprar Vino de Pura Vida
Pura Vida se llama la bodega de Rober y María, una pareja enamorada de su viñedo y sus vinos naturales. Comenzaron su aventura allá por el año 2012 en Fondón, Almería (España), y desde el principio el objetivo estuvo marcado en trabajar la tierra de la forma más respetuosa y ecológica posible.
Viñedo de Pura Vida
Pura es la vida que habita en sus campos. Pura es la uva que crece en sus viñas. La pareja vitivinícola cuida al máximo el terruño e interviene poco y nada en los procesos naturales del vino. Al estar situados en un típico pueblo de la Alta Alpujarra Almeriense, protegido por Sierra Nevada, Sierra de Gádor y el río Andarax, sus suelos arcillosos son únicos. Un ecosistema, entre la tierra y el clima, que lo vuelve ideal en la historia tradicional del vino.
En este lugar geográfico, hay pocas precipitaciones, muchos días de sol y grandes cambios de temperatura entre el día y la noche. Poseen media hectárea para vinificación y una hectárea de uva blanca de la zona. En Pura Vida no se usa nada de productos químicos, no riegan. El abono que utilizan son los desechos de la vendimia y el ganado que utilizan para desbrozar. Tampoco hacen labor de labrado, para mantener el equilibrio natural, sostenible y estructura del suelo.
Vinos de Pura Vida
Aquí se manifiesta el poder de la sonrisa y el amor por la vida. Recolectan la uva cuando está en su momento adecuado de azúcar y acidez, la seleccionan a mano y pasan a la bodega. Allí, se despalilla y esperan la hora ideal, el momento mágico de su fermentación natural espontánea. Sus vinos no están clarificados, ni filtrados. Se dejan llevar por la confianza absoluta en el tiempo y las bajas temperaturas, quienes terminarán de limpiar y decantar el vino. De eso se trata hacer vinos naturales desde un marco ecologista. Todo el trabajo de la bodega Pura Vida es completamente natural, desde la recogida de la uva hasta el etiquetado y embotellado.