VinoLoverLos vinos ecológicos abren paso firme en el mundo del vino a nivel internacional. Según el último informe publicado por IWSR, se prevé que para 2022 se llegue a vender alrededor de 87,5 millones de botellas de vinos orgánicos en todo el mundo, impulsado fundamentalmente por los mercados europeos.
El vino ecológico se caracteriza por el desarrollo de prácticas sostenibles y respetuosas con el medio ambiente a lo largo de todas las etapas de su elaboración, lo cual incluye tanto la viticultura como la vinificación.
Aquí te presentamos una selección de bodegas icónicas en la elaboración de vinos ecológicos, que no puedes dejar de probar.
1. La Compañía de Vinos Telmo Rodríguez
La Compañía de Vinos Telmo Rodríguez nace en 1994 tras la asociación de Telmo Rodríguez, heredero de Remelluri, y Pablo Eguzkiza: ambos comparten experiencia trabajando en las prestigiosas bodegas Cos d’Estournel, Petrus y Domaine de Trevallon. El objetivo de la compañía es la de trabajar en zonas y viñedos originales de la Península Ibérica. Son viñedos que apenas han variado su forma de ser podados, con variedades autóctonas y laderas escogidas por los ancestros. Todos estos argumentos son la base de partida de un proyecto original y comprometido.
La escasez de medios obligó a la Compañía de Vinos Telmo Rodríguez a iniciar su reto en zonas vitícolas poco conocidas pero con precios de uva asequibles. Tras la compra de uva, se fueron adquiriendo los primeros arrendamientos de viñedos y a estos las primeras escrituras de compra para determinadas parcelas.
Actualmente la Compañía de Vinos Telmo Rodríguez trabaja con sus propios viñedos en las denominaciones de origen: Rioja bajo los vinos de Lanzaga situados en Rioja Alta y Rioja Alavesa; Ribera del Duero para la elaboración de su colección de vinos Matallana; Toro, con el objetivo de interpretar el gusto de los vinos Dehesa de Gago de cepas sin injertar; Málaga, siendo la Compañía de Vinos Telmo Rodríguez los pioneros en la elaboración del mejor Moscatel dulce en el panorama nacional conocido como Molino Real; Valdeorras y la finura atlántica gallega de Gaba do Xil; Rueda, con el dominio absoluto de las variedades Verdejo y Sauvignon Blanc para presentar su ya afamado vino Basa; Cigales, el reto de Telmo Rodríguez para ofrecer su Viña 105 interpretado con las variedades Garnacha Tinta y Tempranillo; y Cebreros donde junto con la participación como socio externo de Carlos Sainz, elaboran su vino de pizarra parda, Pegaso Barrancos.
2. AT Roca
Los vinos de AT Roca son vinos del corazón del Penedés que buscan ser el fiel reflejo del paisaje que los rodea, a partir de una viticultura ecológica, respetuosa con el medioambiente, y de un trabajo de recuperación de variedades autóctonas.
3. Mas Candí
Mas Candí es el proyecto de cuatro jóvenes viticultores unidos para elaborar sus propios vinos ecológicos. La bodega está situada en Les Gunyoles d’Avinyonet (Alt Penedès), en las lindes del Parque Natural del Garraf. Construida en 2006, han sabido retomar los viñedos que sus abuelos ya cultivaban. Las vides alcanzan hasta los 60 años.
Una de las fantásticas ideas de esta bodega ha sido la de retomar variedades autóctonas para recuperar su cultivo. Sus aspiraciones hacia la sostenibilidad han dado fruto y han logrado resurgir tintas catalanas que estaban extinguidas por la devastación de la filoxera o por su bajo rendimiento. Entre ellas trabajan la Mandó, Mònica, Sumoll Cannonnau y Roigenc, y las blancas Malvasía de Sitges y Torbat.
Los viñedos de Mas Candí ocupan terroirs de suelos arcillo-calcáreos, de naturalezas parecidas en un clima mediterráneo. En esta pequeña bodega buscan trabajar con el paisaje imitando el equilibrio típico de un bosque. Tanto las actividades vitícolas como las vinícolas, se realizan a mano para cuidar al máximo la uva.
Respetan el medioambiente y la biodiversidad: no emplean ningún tipo de fertilizantes químicos, ni fungicidas, ni pesticidas. Estos jóvenes viticultores han creado un ecosistema paralelo, donde nutren a la planta con sus propias hojas transformadas por microorganismos del suelo.
Otras de las variedades que cultivan también son la de Cabernet Sauvignon, Macabeo, Xarel.lo y Garnacha Blanca. Entre las botellas más destacadas de esta bodega catalana podemos encontrar el blanco sin crianza tradicional, fresco y crujiente, Desig, el espumoso y vibrante, Mas Candí Brut Nature, el alocado, Tinc Set Ancestral 2019, y el ligero blanco sin crianza, Tinc Set Baudili 2019.
4. Bodegas y Viñedos Ponce
Juan Antonio Ponce es quien se encuentra al frente de la bodega familia Bodegas y Viñedos Ponce, ubicada en el sureste de España, en la región de la Manchuela. Allí, cultiva la variedad Bobal en suelos arenosos y calizos. La filosofía de la bodega es homenajear a esta variedad autóctona y elaborar vinos que sean un fiel reflejo de su terruño.
Ponce fundó está bodega con solo 23 años de la mano de su padre, después de haber trabajado como mano derecha de Telmo Rodríguez durante cinco años.
Las uvas son vendimiadas manualmente y se fermentan con levaduras autóctonas, con un tipo de fermentación conocido como “remango”.
5. Mustiguillo
Mustiguillo es el proyecto de vinos sostenibles con más de 100 años de la familia Sarrión-Martínez, ubicado a 800 metros sobre el nivel del mar, en Utiel (Valencia). Sus vinos y viticultura cuentan con certificación ecológica, ya que practican una viticultura sostenible y natural, respetando el medio ambiente.
Los racimos son vendimiados a mano desnuda, recolectados y seleccionados uno por uno en cajas de 15 kilogramos, para luego fermentar la uva con levaduras propias. El resultado son vinos sinceros, que expresan fielmente el terroir al que pertenecen y sus matices.
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