5 vinos espumosos para el brindis de año nuevo

Se acerca fin de año y una de las grandes incógnitas a resolver es qué botella elegir para el brindis más importante. Desde Gourmet Hunters, te ofrecemos una selección experta con cinco propuestas de vinos espumosos ideales para hacer de este chin chin un momento inolvidable. 

 

1. Can Sumoi Ancestral Montònega 2018

Un gran opción para el chin chin de Nochevieja es el vino espumoso Can Sumoi Ancestral Montònega 2018 de la bodega Can Sumoi. Elaborado a partir de un proceso de fermentación alcohólica espontánea con levaduras autóctonas, con un 100% parellada y un 11,0% de contenido alcohólico, es una combinación ideal si tu menú incluye ahumados o embutidos ibéricos. 

 

2. Clos Lentiscus Núria Cartoixà Vermell 2018

El vino espumoso ancestral Clos Lentiscus Núria Cartoixà Vermell 2018 es otra prometedora alternativa para esta noche especial. Se trata de un vino natural, elaborado a partir de una fermentación alcohólica espontánea con levaduras autóctonas y de la variedad Cartoixà Vermell. Tiene un 10,5% de volumen alcohólico y es un maridaje perfecto para unos arroces con pescado.

 

3. Pierre Gimonnet Cuis 1er Cru Brut

El champagne Pierre Gimonnet Cuis 1er Cru Brut, de más de 90 Puntos Parker, es otra opción exclusiva y cautivadora, para este fin de año. Ligero, vibrante, con 12,5% de alcohol, este espumoso elaborado un 100% a partir de Chardonnay tiene una crianza mínima de 24 meses en botella antes del degüelle. Una gran elección si tienes en mente cenar mariscos o embutidos ibéricos. 

 

4. Colet Navazos Extra Brut 2016

El cava Colet Navazos Extra Brut 2016 de Equipo Navazos, elaborado en un 100% a partir de Xarel·lo, con un 12,5% de contenido alcohólico y una crianza mínima de 26 meses en botella, es otro gran candidato para despedir la última noche de este 2020, especialmente si piensas acompañarlo con mariscos o sushi. 

 

5. Bartucci Bugey Cerdon Ancestral 2018

El vino espumoso ancestral Bartucci Bugey Cerdon Ancestral 2018 de Domaine Bartucci es otra de nuestras botellas preferidas para este fin de año. Se trata de un vino natural, elaborado a partir de una fermentación alcohólica espontánea con levaduras autóctonas, con una mezcla de Gamay, Poulsard y Chardonnay, con tan solo 7% de alcohol. 

Tiene una crianza mínima de tres meses en botella antes del degüelle con 40 gramos de azúcar residual y embotellamiento sin sulfitos añadidos. ¿Su pareja ideal? Escabeches. 

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